Después de que Arthur Kirk fuera asesinado por un equipo SWAT de la Patrulla Estatal de Nebraska, algunos acusaron que el asesinato no estaba justificado y que a Kirk se le permitió desangrarse mientras el alguacil del condado de Hall fue llevado al hospital en una ambulancia. La legislatura y el gobernador Bob Kerrey designaron al ex juez de Lincoln Samuel Van Pelt como investigador especial para revisar el caso y los cargos.
Su informe fue publicado en diciembre de 1984. Van Pelt dijo que la muerte de Kirk podría haberse evitado, pero la policía actuó de manera prudente en circunstancias difíciles. Van Pelt concluyó que el asesinato de Kirk por parte del equipo SWAT de la Patrulla Estatal de Nebraska ocurrió debido a "demasiados factores coincidentes y no relacionados" y no fue un asesinato orquestado por la policía como algunos de los amigos de Kirk habían afirmado.
Los aspectos más destacados del informe fueron:
"La fe de Kirk habría estado mejor colocada en su propia iglesia y religión, o en un grupo de apoyo orientado a la agricultura como el Farm Crisis Response Council, patrocinado por Inter Church Ministries of Nebraska".
Finalmente, Van Pelt dijo que la crisis agrícola fue la verdadera causa del asesinato.
"El primer factor causal, y el telón de fondo de todo el escenario, es la economía agrícola".
Podría haber sido peor. Van Pelt dijo que es una suerte que la Patrulla no haya intentado usar gas lacrimógeno para atrapar a Kirk. Kirk tenía una máscara de gas, y si la Patrulla hubiera usado gas y luego corrió hacia la casa, pensando que Kirk estaba incapacitado, varios oficiales podrían haber recibido disparos. El equipo SWAT fue "pasivo y no provocador" en sus acciones, concluyó Van Pelt.