El ataque japonés a Pearl Harbor cambió la vida de todos los habitantes de Nebraska. Se unieron en un objetivo común de lograr la victoria total, sin importar el sacrificio. La mayoría de los habitantes de Nebraska no servían en las fuerzas armadas. Sin embargo, como civiles, se enfrentaban a muchos desafíos en el frente interno e hacían su parte para ayudar a ganar la guerra. El cartel de reclutamiento del tío Sam y los eventos de Pearl Harbor ayudaron a motivar a un gran número de jóvenes a alistarse y luchar en el frente.
A los habitantes de Nebraska se les dijo que "se metieran en la pelea", y lo hicieron con entusiasmo. Se les animó a comprar bonos de guerra para ayudar a financiar el esfuerzo, y lo hacían. Se les dijo que aceptaran trabajos y ayudaran a producir tanques, aviones y municiones. Se les dijo que guardaran y reciclaran materiales. Lo hacían. Por ejemplo, las chicas de la fogata de Lincoln estaban muy orgullosas de los resultados de su búsqueda.
"Los Comando Juveniles recolectaban desechos de todo tipo. Mi hermana y yo recogimos paquetes de cigarrillos y envoltorios de goma de mascar de la escuela todos los días y separamos el papel de aluminio del papel. Luego hicimos una gran bola con él. Cuando se convirtió en del tamaño de una pelota de béisbol, lo convertimos en el traficante de chatarra. Tenía que pesar cinco libras antes de que él lo aceptara ".
- James Murphy, estudiante de la escuela primaria Columbus.
"Todo lo que supe cuando supe [sobre] Pearl Harbor ese día fue que dije: 'Bueno, ahí va mi boda en junio'".
- Marie Curtis, profesora de la escuela rural de Genoa.
La guerra tuvo un gran impacto en el romance. El número de licencias de matrimonio emitidas en el condado de Lancaster se duplicó entre 1942 y 1943. Desafortunadamente, muchos matrimonios no duraban durante los años de guerra. Las largas separaciones y la amenaza de muerte afectaban enormemente la vida de las personas. La tasa de divorcios aumentaba.